Desde mediados de junio la tendencia en la capital estatal registró un aumento de casos, los que rebasó respecto al Puerto este viernes 16 de octubre.
Raúl López Téllez
Este viernes 16 de octubre Morelia superó en el número de contagiados de coronavirus al puerto de Lázaro Cárdenas, municipio que desde las primeras semanas del inicio de la pandemia encabezó las tendencias.
De acuerdo con las estimaciones oficiales, el día 15 del mes esta capital acumulaba 4 mil 624 casos, contra los 4 mil 631 reportados en el Puerto hasta la fecha. Este viernes, Morelia alcanzó los 4 mil 695 casos, contra 4 mil 649 en el municipio porteño. A nivel estatal, se reportan hasta la fecha 22 mil 851 casos confirmados, con mil 838 defunciones y 19 mil 722 pacientes recuperados, según los datos de la Secretaría de Salud de Michoacán.
En la tendencia del aumento de casos en la capital michoacana, ha influido la apertura de algunos sectores no esenciales a partir del primero de junio, al igual que la paulatina incorporación de la casi totalidad de los comercios y actividades a la llamada “Nueva Normalidad” en la versión federal y “Nueva Convivencia” para la estatal, lo que se ha acompañado de un notorio relajamiento en las medidas de contención, desde el portar cubreboca –cuyo uso se establece como obligatorio de acuerdo a un decreto del gobierno estatal-, hasta la permisividad en operación de lugares con escasa ventilación y sin cubrir medidas de sana distancia, como son bares y gimnasios.
A partir del 17 de junio, el aumento de casos coloca a Morelia después del puerto, desplazando en ese segundo lugar al municipio de Uruapan, que pasó y se mantiene en la tercera posición estatal. El aumento de casos generó que el gobierno de la entidad optara por la contención a través de un decreto anunciado el 31 de julio.
En las últimas semanas, han sido varias las manifestaciones de sectores tanto educativos, que a través de marchas y plantones exigen desde pagos hasta incorporación al servicio profesional docente, como de colectivas feministas en demanda del cese a desapariciones y crímenes de mujeres, protestas en las que se observan el mínimo de condiciones de seguridad sanitaria entre sus participantes y donde prevalece el contacto físico, un factor de riesgo que ha sido advertido por especialistas desde el inicio de los contagios en el mundo.
Un pleito con efectos
Poco favor hace, además, el encono entre las políticas de la federación y de la entidad y que, en el caso de Morelia, no son acatadas por el Ayuntamiento de factura morenista, por lo que el decreto del Ejecutivo de Michoacán, -que entre otras cosas señalaba el cierre de plazas y lugares públicos de esparcimiento-, ha sido desacatado desde su publicación y entrada en vigor por el alcalde Raúl Morón Orozco, quien además ha mostrado un sensible desdén a medidas de seguridad al permitir concentraciones numerosas en sus eventos y organizar celebraciones, como el pasado 15 de septiembre con una “noche mexicana” en el Palacio Municipal, como se puede ver incluso en sus actividades proselitistas en busca de la gubernatura estatal, donde aparece sin cubreboca o frente a simpatizantes que no escatiman el contacto físico en sus reuniones.
De hecho, el tema alcanzó la tribuna del Congreso local, donde el pasado 14 de octubre, el diputado perredista Antonio Soto elogió las medidas implementadas por el gobierno de Silvano Aureoles Conejo, a propósito del V Informe de Gobierno, “frente a lo que se observa en la federación, de manera que el Gobierno de Michoacán se sitúa entre los mejores calificados por la ciudadanía en este rubro, superando por casi 18 puntos porcentuales al Gobierno Federal”, señaló el integrante de la LXXIV Legislatura del Congreso del Estado, además de indicar que la administración estatal es aprobada “por casi siete de cada diez michoacanos por su manejo de la pandemia”.
El 6 de octubre, el mismo legislador promovió un exhorto “al titular del Poder Ejecutivo Federal, para que instruya al Secretario de Salud a reunir en forma expedita al Consejo de Salubridad General, con el objeto analizar la estrategia que hasta el momento ha seguido para enfrentar la pandemia por covid 19”.
De los puntos no acatados por el gobierno de Morón Orozco –quien no cumple estrictamente el protocolo de portar cubreboca-, y previstos en el decreto mencionado, se encuentra la limitación a operar tianguis y mercados en la vía pública, lo que sigue ocurriendo. En lo que sí coinciden el morenista y el perredista, es en la apertura de bares y gimnasios, al igual que en la aplicación discrecional y contradictoria de permisos y aplicación de reglamentos, como en el caso de la próxima celebración por día de muertos, donde los panteones públicos no operarán para evitar aglomeraciones pero sí habrá una ceremonia con una clara intención de atraer visitantes ante el alicaído panorama en el sector turístico. El mismo 15 de septiembre, no decretó que hubiese Ley Seca, como lo había planteado a los ayuntamientos el gobierno estatal, por lo que bares y centros nocturnos operaron bajo la “nueva normalidad”.
Fotografía: Photofractal.